martes, 26 de agosto de 2014

Sobran 100 diputados y 32 senadores

Desde hace algunas semanas los tres principales partidos han anunciado su intención de someter a consulta popular una serie de planteamientos que son de gran importancia para la vida pública nacional.


El PRI informó que consultará con los ciudadanos si deben o no, desaparecer 100 diputados federales  y 32 senadores “plurinominales”.


El tema es una asignatura pendiente de la clase política con la ciudadanía. Los diputados y senadores plurinominales históricamente han sido trofeos de la partidocracia, puesto que éstos legisladores no fueron electos mediante el voto directo de los electores.

La propuesta priísta es viable desde la perspectiva política ya que es necesario una transformación constante de las instituciones atendiendo a los reclamos de una sociedad cada vez más informada y participativa en temas públicos. Además, lo planteado por el presidente del PRI, Cesar Camacho Quiroz, se justifica por razones financieras y organizativas al interior del Congreso de la Unión por los grandes ahorros que la desaparición de estos diputados y senadores generaría para el erario público.


Algunos datos muestran que la eliminación de 100 diputados plurinominales podría generar un ahorro de más de mil 136 millones de pesos en sueldos y apoyos económicos. Un estudio divulgado en la prensa nacional señala que “representaría un ahorro extra de 601 millones de pesos, ya que en promedio la secretaría general del recinto legislativo destina 167 mil 666 pesos mensuales por cada legislador en gastos conocidos como subvenciones (apoyos) tanto ordinarios como extraordinarios. Las subvenciones son tomadas del presupuesto anual que los mismos legisladores se aprueban para cumplir con las obligaciones y compromisos que marca la ley, que para este 2014 fueron de seis mil 795 millones 524 mil pesos”.


De prosperar la iniciativa del PRI, la Cámara de Diputados se ahorraría aproximadamente el 20 por ciento del total del presupuesto que recibe en sueldos y apoyos económicos de quienes integran ésta asamblea parlamentaria. También habría mayor austeridad en lo erogado para el pago de asesores, servicio de alimentos, boletos de avión, primas vacacionales, seguros de gastos médicos mayores, telefonía celular, pases de casetas en carreteras y vehículos, entre otros gastos. 


Ahora bien,  resulta también necesario analizar cuáles son los temas que tanto el PAN como la izquierda buscan abanderar como temas para la consulta popular el próximo año.


La propuesta panista resulta por demás electorera y populista debido a que difícilmente algún mexicano se opondría a que se incremente el salario mínimo.
Un aumento de golpe al salario mínimo indudablemente generaría una espiral inflacionaria que incrementaría de forma dramática los precios de la canasta básica y otros artículos de primera necesidad. Se correría el riesgo que empresas y comercios despidan a buena parte de su plantilla laboral al no poder costear la nómina y también se verían afectadas las prestaciones que los trabajadores reciben.


Un referente emblemático de esto es Venezuela, donde los decretos en materia de salarios mínimos a la alza propiciaron una economía estancada y dependiente de una sola actividad (la petrolera), sumida en una inflación incontrolable. Es por ello que el propio gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, ya advirtió las implicaciones que esto pudiera tener si se hace sin los conocimientos básicos del ciclo económico y su comportamiento.


En cuanto a la Consulta que proponen por separado PRD y Morena para echar abajo la reforma energética con argumentos arcaicos e involutivos que amenazan el futuro próspero y moderno que las reformas estructurales generarán para el país en el mediano plazo, argumentando la transgresión de la soberanía y el desmantelamiento de empresas propiedad de la nación,  se antoja complicado que la Suprema Corte de Justicia de la Nación dé luz verde a un planteamiento que carece de solidez argumentativa en materia jurídica y de una visión de avanzada.

Ahora dependerá de los partidos recolectar al menos un millón 600 mil firmas, entregarlas al Congreso, luego éstas firmas deberán ser validadas por el Instituto Nacional de Elecciones (INE) y,  finalmente, la Suprema Corte de Justicia de la Nación determinará si es constitucional la materia de la consulta.

Hay que estar atentos para ver en que terminan éstas iniciativas de Consulta Popular.


  

martes, 19 de agosto de 2014

Que las encuestas decidan

Las encuestas se han convertido en una herramienta muy influyente para tomar decisiones en los partidos políticos.

Son utilizadas para obtener diagnósticos acerca de las fortalezas y debilidades que aquejan a los institutos políticos, para identificar demandas ciudadanas, conseguir información clave de los posibles candidatos así como para diseñar estrategias que hagan posible los triunfos electorales.

Los llamados estudios de demoscopia (encuestas diseñadas científicamente) han sido utilizados desde hace mucho tiempo para generar conocimiento en las ciencias sociales. Cuando se cuida el rigor metodológico que exige su diseño proporcionan información confiable.

Sin embargo las encuestas han sido sobrevaloradas. Se piensa que son pronósticos, ventanas para observar el futuro y que son infalibles.

Nada más alejado de la realidad. Las encuestas son fotografías del momento. Retratan un instante de la compleja y cambiante realidad.

Lamentablemente en los últimos tiempos se han utilizado también como propaganda. La información que reportan es presentada con trampa atendiendo a intereses ocultos.

Por ello ahora que algunos de los partidos políticos más importantes han decidido utilizarlas como parte de sus métodos de elección de candidatos es necesarios que en su diseño y aplicación se observe el rigor científico que ellas exigen para ser creíbles.

Dejar que los resultados que arroje una encuesta sea lo que decida quién debe ser el candidato es una gran responsabilidad. Si se presentaran dudas o desconfianza entre los contendientes por fallas en su diseño o suspicacias acerca de la empresa que las aplicará, se pueden descarrilar los procesos de elección interna en los partidos políticos. Ello provocaría rupturas y restaría apoyos y legitimidad al presunto favorecido.

Un candidato a gobernador, por ejemplo, no debe iniciar su campaña desgastado por la inconformidad de los que fueron sus adversarios internos. Si se aplican encuestas no debe haber duda de que es el mejor.


Por ello el PRI y el PAN que hasta ahora son los partidos que tienen incorporados en sus Estatutos la posibilidad de utilizar las encuestas como método electivo deberán ser escrupulosos en extremo al depositar su confianza en los estudios de demoscopia para elegir a sus candidatos. 

martes, 12 de agosto de 2014

La mentira repetida mil veces

Acción Nacional (PAN) siempre se ha desempeñado como un eficiente partido en la oposición. La brega de eternidad en la que se mantuvo durante décadas lo dotó de habilidades para presionar, denunciar y actuar en la marginalidad. Nacido a la vida política en 1939 invariablemente se han mantenido como una “oposición leal” al sistema político del que es parte.

Como partido testimonial invariablemente privilegió la vía pacífica, legal y electoral para avanzar en su proyecto de nación  resumido en su lema “Por una Patria Ordenada y Generosa”.

Su arribo al poder presidencial en el año dos mil no sólo produjo la alternancia en el poder, fue también el principio de su degradación. Ellos – los panistas- siempre tan “decentes” extraviaron el rumbo y su identidad doctrinaria. “Ganaron el poder y perdieron al Partido”.

Instalados en el poder fueron colonizados por hordas de oportunistas que insensiblemente erosionaron el prestigio que habían ganado durante décadas. Muy pronto se desgastaron y perdieron legitimidad. Los errores, frivolidad y actos de corrupción cometidos por Fox y la señora Martha, sumados a los cometidos por Calderón, los gobernadores y alcaldes panistas provocaron que en tan sólo doce años fueran expulsados  del poder a golpes de voto por una ciudadanía desencantada de ellos.

Fuera del poder sobrevino una crisis interna cuyo mayor síntoma es y sigue siendo la división interna y el desprestigio.

Nostálgicos del poder, ahora intentan volver por sus fueros. Quieren recuperar su antigua posición de Partido fuerte, construirse como alternativa al gobernante PRI.

Instalados en el preámbulo de las elecciones de 2015 están aplicándose con tesón a recuperar los espacios perdidos. Para ello echan mano de toda su experiencia como partido de oposición y de herramientas de propaganda política para posicionarse con fuerza.

En esta lógica adquieren sentido los sistemáticos ataques al gobierno del doctor Fernando Toranzo. Los panistas se aplican con vehemencia en una estrategia de  propaganda “negra” al estilo de la recomendada por Joseph Goebbels – ministro de propaganda de Hitler- que recomendaba repetir mil veces una mentira hasta convertirla en verdad.

Sólo que no han entendido que para que una estrategia de lodo como la que llevan aplicando varios meses se requiere que las mentiras que utilizan tengan elementos de verdad y hasta ahora los temas seleccionados para atacar y desprestigiar al gobierno del doctor Toranzo han sido muy poco creíbles y consistentes.

Que no hay obra, que no hay inversión, que es un sexenio perdido. Los datos duros, los resultados de políticas públicas en favor de los marginados, las grandes inversiones de capitales extranjeros, las obras de infraestructura carretera, el impecable clima laboral y la sensibilidad para derogar impuestos como el de la tenencia vehicular desmienten los infundios que lanzan.

El gobierno del doctor Toranzo es un gobierno de resultados. De octubre de 2009 a febrero de este año se han invertido 14 mil 180 millones en 29 mil obras y acciones en todo el estado.

Adicionalmente hay que sumar los 32 mil 752 millones de pesos en inversiones realizadas y concertadas con empresarios nacionales y extranjeros. En los últimos años se han instalado 108 nuevas empresas y se han ampliado 34 más. Adicionalmente se han creado 205 mil 663 fuentes de empleo en los últimos cinco años.
La llegada de BMW es sin duda la cereza del pastel que confirma que San Luis Potosí es un Estado digno de confianza para los grandes inversionistas.


Estas son realidades y no mentiras que aunque se repitan mil veces no hacen mella a un gobierno que está cumpliéndole a los ciudadanos.

martes, 5 de agosto de 2014

Los nuevos consejeros electorales

Avanza el proceso de selección de los nuevos consejeros electorales que integrarán el Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (CEEPC). 131 potosinos y potosinas aspiran  a convertirse en los nuevos árbitros de la contienda de 2015. A más tardar el 30 de septiembre deberán estar electos siete Consejeros titulares y siete suplentes. De entre los titulares uno será el nuevo presidente del CEEPC.

El proceso electivo está a cargo de la Junta General del Instituto Nacional de Elecciones (INE). El Congreso del Estado que antes tenía ésta atribución ahora sólo será un espectador más, ya no intervendrá en este proceso.

Uno de los argumentos que se hicieron valer para centralizar la función electoral en un Instituto Nacional de Elecciones fue que los gobernadores intervenían y manipulaban las decisiones de las autoridades electorales. Fue sobre todo el PAN quien demandó que los Consejos e Institutos estatales electorales ya no fueran nombrados por los Congresos locales. El nombramiento de estas autoridades se había convertido en un insano ejercicio de reparto de cuotas entre los grupos parlamentarios de los diversos partidos políticos. Así que ahora y para evitar desconfianzas se ha establecido en la nueva legislación electoral que sea el INE quién nombre –previo proceso electivo- a los Consejeros Electorales en los estados de la república.

Quienes lleguen a ser electos Consejeros deberán acreditar que poseen los conocimientos técnicos de la materia electoral y una incuestionable independencia de partidos y gobierno.

El mayor riesgo que se vislumbra en el horizonte es que las elecciones de 2015  provoquen conflictos y una baja legitimidad por una mala administración del proceso electivo.

Así que el mayor desafío del INE es conjurar el peligro de que las elecciones se conviertan, como en el pasado, en fuente de ingobernabilidad.

Debe admitirse que en la sociedad y en los partidos políticos renació la desconfianza hacia la autoridad electoral. Por ello el nuevo INE debe reconstruir la confianza perdida. Y un primer paso para lograrlo será realizar un proceso transparente y legal al seleccionar a los Consejeros Electorales en los estados.
El INE debe entregar buenas cuentas en 2015 si quiere detener el progresivo deterioro en la confianza hacia la autoridad electoral.

El proceso 2015 que ya está entre nosotros pondrá a prueba las normas, procedimientos e instituciones que han sido creadas en la reciente reforma constitucional de principios de año.

Será una prueba de ácido para todos. Partidos políticos, instituciones y ciudadanos impulsarán o frenarán con su conducta una etapa más de desarrollo político en el país. La consolidación o regresión de nuestra democracia es lo que está en juego

martes, 29 de julio de 2014

Desinformación y guerra política

Ya empezó la guerra electoral. Los partidos políticos desarrollan estrategias para lograr un posicionamiento inicial que los haga ver fuertes y listos para la contienda de 2015.

En la opinión pública se han colocado con fuerza los nombres de los que podrían ser candidatos a los múltiples cargos de elección popular. En especial despierta  especulación el tema de los aspirantes a la gubernatura.

PRI, PAN, PRD y los partidos de minoría ya tienen sus potenciales precandidatos a gobernador.
Se especula también acerca de los posibles métodos de elección para definir a los abanderados. Encuestas, candidatos de unidad y consultas a militantes y simpatizantes están sobre la mesa como alternativas. Métodos electivos que estarán definiendo allá por el mes de noviembre de este año a los finalistas que competirán por la gubernatura.

Los dirigentes de todos los partidos afinan sus estrategias, proponen alianzas, trabajan en la organización interna de sus estructuras electorales y atacan y contraatacan a sus adversarios.
Mientras tanto el Instituto Nacional de Elecciones ya empezó la selección de quienes integrarán la nueva autoridad electoral en el estado.

Todo este ambiente político nos revela que ya estamos instalados en la lucha por el poder, disputa que habrá de definir quiénes conquistarán la representación de los ciudadanos.

Al respecto llama la atención que el Partido Acción Nacional se haya montado en una estrategia de ataque contra el PRI en dos frentes. La primera consiste en un ataque sistemático a la labor y resultados del gobierno estatal. Descalificaciones y críticas corrosivas que buscan desprestigiar y debilitar la imagen y legitimidad del gobierno del estado.

La segunda es divulgar la versión de que en el PRI se han encendido los “focos rojos” por un presunto peligro de que este partido pierda la gubernatura. Iniciaron esta estrategia a raíz de una publicación divulgada por el periódico Reforma en el que se daba cuenta de un supuesto estudios de análisis y prospectiva en el que se vaticinaba que el PRI podría perder la gubernatura en San Luis Potosí. Este estudio no cita fuente precisa responsable de la investigación. Tampoco metodología, por lo que queda claro que es una estrategia de propaganda sucia que busca crear la percepción de que el PRI puede perder.

Basados en las conclusiones del apócrifo “Estudio de Prospectiva 2014-2015” los panistas procedieron de inmediato a colocarse como los imparables ganadores de las elecciones del próximo año. En una lógica absurda sostenida en una especie de determinismo histórico los dirigentes y precandidatos del PAN afirman que ellos estarían destinados a vivir una nueva época de oro en el poder. Como si la voluntad de los votantes no contará para definir al ganador o como si ya hubiera desaparecido el peligro de la división interna que está ocasionando la versión de que Gustavo Madero va a imponer al candidato a la gubernatura utilizando una encuesta arreglada.


Pero así es la lógica de la disputa por el poder en su versión más obscura. La propaganda negra sustituye a las propuestas de solución  y compromisos que deberían hacer partidos y candidatos para argumentar sus aspiraciones de gobernar.